Porque Los Niños Dejan De Comer A Los 2 Años

Es una etapa muy común en la que los niños dejan de comer. Los padres a menudo se preocupan por esto, pero en la mayoría de los casos simplemente se debe a que los niños están experimentando nuevos alimentos y sabores. También pueden estar pasando por un período de desarrollo en el que se sienten menos hambrientos. No obstante, si estás preocupado por el apetito de tu hijo, hay algunas cosas que puedes hacer para ayudarlo a comer más.

Cambios en el apetito

Los niños pequeños experimentan muchos cambios en su apetito durante sus primeros años de vida. Alrededor de los 2 años, es común que los niños empiecen a comer menos. Esto se debe a que están empezando a ser más independientes y quieren tener más control sobre lo que comen. También pueden estar pasando por un período de desarrollo en el que se sienten menos hambrientos.

Nuevos alimentos y sabores

Los niños pequeños también están empezando a probar nuevos alimentos y sabores. Esto puede ser una experiencia emocionante, pero también puede ser desalentador. Algunos niños pueden ser reacios a probar nuevos alimentos, especialmente si tienen un sabor o textura diferente a lo que están acostumbrados.

Problemas médicos

En algunos casos, la pérdida de apetito puede ser un signo de un problema médico. Si tu hijo no está comiendo bien y también tiene otros síntomas, como fiebre, vómitos o diarrea, debes llevarlo al médico.

Consejos para ayudar a tu hijo a comer más

Hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a tu hijo a comer más:

• Ofrécele comidas y meriendas regulares.
• Evita ofrecerle comida chatarra o bebidas azucaradas.
• Haz que las comidas sean divertidas y agradables.
• Deja que tu hijo te ayude a preparar la comida.
• Sé paciente y no te rindas.

Si estás preocupado por el apetito de tu hijo, habla con tu pediatra. Él puede ayudarte a determinar si hay un problema médico que está causando la pérdida de apetito de tu hijo y también puede ofrecerte consejos sobre cómo ayudarlo a comer más.

Con un poco de paciencia y esfuerzo, puedes ayudar a tu hijo a superar esta etapa y volver a comer bien.